En líneas generales el hotel no resultó en absoluto ser lo que esperaba. En mi opinión lo que se muestra en la web dista mucho de lo que realmente es. Lamentablemente nos cambiaron de habitación al otro día de haber llegado, con todo lo que eso conlleva: volver a guardar todas nuestras cosas que ya habíamos organizado para la estadía. El cambio se debió a que iban a realizar trabajos de mantenimiento en el piso donde estábamos alojados. Una lástima que no hayan tenido en cuenta ese tipo de cosas antes de ingresarnos al hotel. Son detalles que molestan. Las habitaciones que nos ofrecieron (2) no tenían la vista que tenía la habitación inicial, una era pequeñísima y la otra (la que elegimos) era la que mas se asemejaba a la 1ra habitación sin llegar a ser la misma. Por otro lado la bañera estaba "descascarada", con sectores donde no tenia pintura, pintura saltada en las paredes del baño y también en el resto de la habitación... Son detalles que suman (o restan, como en este caso). Si bien los arreglos de la Av. Bustillo son ajenos al hotel, sinceramente esto complicó muchísimo el ir y venir caminando hacia y desde el centro, muy peligroso con el tráfico (muy intenso) que pasaba al lado nuestro. Una pena. No es un hotel económico, al contrario, y quizás mis expectativas estuvieron basadas en lo que me cobraron por 5 noches. Una desilusión total para mí. Lo rescatable es la atención de Martín en recepción y el desayuno que es muy completo, además de la atención del personal en el comedor.
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