Lo primero que quiero es agradecer los dos detalles que tuvieron en el hotel , que hace que nuestra estancia haya sido inmejorable. Por un problema con una reserva en otro alojamiento que nos cancelaron por overbooking , tuvimos que buscar donde dormir a las 10 de la noche , y con nuestro hijo. Llamamos al Fugl Fonix a esas horas de la noche, comprobaron que tenían disponibilidad, y nos gestionaron la reserva por teléfono de una forma rapidísima . Estando la recepción cerrada, ya que llegábamos al hotel a las 11 de la noche, nos habían dejado las llaves de acceso con código de seguridad. Y luego por la mañana, nos equivocamos con el horario del desayuno, llegando una vez pasada la hora, y aun así, la chica que atendía el desayuno, nos dejo desayunar tranquilamente. Dos detalles, aparte de la amabilidad del personal, que hacen que no podamos mas que recomendar este hotel. El hotel esta situado en un pueblo pequeño junto a un pequeño puerto. El sueño por la noche, a pesar de estar situado cerca de la carretera, no se escuchaban ruidos. Dispone de aparcamiento justo en la puerta. El comedor donde dan los desayunos es amplio, y tiene un diseño muy bonito. El desayuno era completo, incluyendo huevos y embutidos, además de zumos y otros elementos. La habitación era sencilla, pero practica y disponía de una pequeña terraza. Además, como fue nuestro caso, admiten poner cama supletoria con un cargo extra. La verdad es que es un hotel muy practico si como nosotros esta visitando Noruega, y cada noche duermes en una localidad distinta. Sin duda alguna repetiríamos.
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