Vaya por delante que es mi opinión subjetiva y lo que nos pasó a nosotros. Cafetería de carretera en la que paras cuando te ves obligado porque se pasa la hora de desayunar y estás en medio de la nada. En la barra 6 personas, algunas ya atendidas. Tuvimos que esperar mucho tiempo para que nos pusieran lo que pedimos, que lo pusieron en la barra,.. después te lo llevas tú mismo a la mesa. A la hora de pagar, el precio fue caro. 1 tostada con york, media tostada con york, 1 tostada con mantequilla, 3 cafés y 1 zumo piña de bote 20cl, total 23€. !!Toma ya!!, precio del Ritz. (El precio que pagué SÍ es objetivo) No comento nada del trato ni de la limpieza del WC. Es otro establecimiento de carretera más, de los que se aprovechan cobrando bien caro a los que van de paso (hay muchos, muchos así). En fin,.. para olvidar y no volver. No pararemos nunca más.
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