Empezando por la mala lavada de cara (reforma según ellos) de un hotel mas viejo que la catapum, conservan todos sus elementos, incluidos los colchones de muelles de hace 60 años, toallas amarillentas lavadas mas que tu te has duchado en toda tu vida y con medallas de todas sus historias, tan solo han hecho una pintada al hotel de blanco a paredes, puertas etc y chapar la ducha de gresite. El descanso no está garantizado, tienes la musica del hotel de la otra punta si abres la ventana, la maquina de bebidas con el compresor a toda maquina y el aire acondicionado de las habitaciones vecinas para que no puedas conciliar el sueño, cerrando las ventanas viejas de madera repintadas y las persianas medio rotas aun escuchas el compresor del aire acondicionado y el ventilador. Si finalmente decides ir a alojarte, tendrás que sumar al precio de la noche, las sesiones del fisioterapeuta que tendrá que arreglar tu espalda cuando vuelvas a tu ciudad, dormir en ese colchon y almohada es como si te hubieran pegado una paliza. El desayuno es muy flojo y los cafés y zumos con agua desalinizada de la isla son tan malos que no hace falta que los pruebes, mejor busca el agua de la jarra que la rellenan de aqua service. No entiendo los buenos comentarios que vimos sobre el hotel y nos animaron a alojarnos en este hotel, hemos ido a hoteles de 1-2 estrellas o hostales con mejores instalaciones, mas modernas y muchas más comodidades para el cliente, se nota que la empresa que lo adquirió busca una alta rentabilidad y es lo único que les preocupa, no piensan ni invertir en reforma, en mantenimiento, en colocar ascensor ni en cambiar textil hogar. Ya cuando llegamos habia algun cliente colocando una reclamación en recepción, en definitiva, para nuestra opinión, eso no son vacaciones, es un completo desastre.
Terjemahkan