Hotel muy bien situado, al lado de la playa y del centro, una gran variedad de bares y restaurantes en la cercanía, para desayunar hay abajo justo un bar del propio hotel. Recepción abierta 24 horas. Habitación correcta para la categoría, dispone de aire acondicionado y frigorífico. Limpieza muy buena, cambio de toallas diario, excelentes camareras de piso. La sombra alargada; hotel muy muy ruidoso, se oyen todos los ruidos de las habitaciones e incluso de recepción, tuve la mala fortuna de tener un "vecino" extraño y ruidoso hasta el punto que tuvo que subir el recepcionista de madrugada a llamarle la atención. La calle también es muy ruidosa, pues bajan todos los empleados de los bares y restaurantes a llevar las basuras, pasando por la puerta y comentando la jugada entre ellos. Desconozco si la planta superior es más silenciosa o algún ala. Buen precio.
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